En esta nueva entrada de blog, inauguro una sección para el arte, y en particular para la fotografía. Tomar una foto realmente buena, de valor artístico y digna de ser contemplada largamente, requiere de mucha paciencia, un don para la observación y la imaginación necesaria para buscar el momento justo, el cuadro preciso que se quiere retratar. Sobre todo, implica saber exactamente qué es lo que se quiere capturar a través del lente para luego ser transmitido al observador. En pocas palabras, no cualquier dueño de cámara fotográfica es un cazador de imágenes.
Con el auge de las cámaras digitales al alcance de todos, la facilidad para tomar cientos de fotos sin afrontar el costo de las películas con su consiguiente proceso de revelado y la incorporación de cámaras en casi cualquier celular, la fotografía cotidiana ha perdido mucho el encanto de antaño y en estos tiempos de exceso de información y frenetismo por procesar todo, se toman fotos sin contenido y a repetición, que además pululan por miles y miles de sitios de internet. En estos tiempos de "abaratamiento" de casi todos los aspectos de nuestra cultura, el verdadero arte surge más valioso que nunca, y sólo ante aquellos que sienten la inquietud de salir en su busca.
En este post en particular, me gustaría compartir con ustedes el excelente trabajo de "Chilín", un amigo de la infancia. Desde bellas escenas de París en blanco y negro, hasta coloridas tomas en perfecto movimiento, se despliega un gran abanico de temáticas cotidianas, vistas desde el punto de vista de un observador fascinado tanto por los detalles mínimos como por grandes escenarios urbanos y naturales. Las personas que pueblan sus fotos están cargadas de vida y humanidad, y no aparecen allí por capricho del fotógrafo, sino que pertenecen al escenario. Todas estas imágenes son parte de nuestra vida cotidiana, pero la magia consiste en verlas en una nueva luz que las enriquece en variadas dimensiones.
Como siempre cierro el post con el material en sí, en este caso, con un enlace a la galería de fotos de Chilín. Espero que les guste tanto como a mí.
